Los Poblados Marítimos tenían una gran cantidad de edificios coronados con miramares, por desgracia hoy sólo quedan unos pocos.
¡Qué gustosamente se saboreaba Valencia desde aquellos miramares! Teodoro Llorente hijo.
Desde el mirador del inicio de la calle José Benlliure se habrá visto pasar el tiempo y el cambio de la fisonomía urbana de los alrededores. Este mirador se puede ver en la foto panorámica de José Martínez Sánchez para la compañía de J. Laurent.
Colección propia.
Desde él se podía contemplar el puerto a finales del XIX, sobre todo las puertas de salida del Grao hacia el norte y en especial el portal del Cabanyal.
1870. El portal en el centro de la imagen de la foto de la Cia. Laurent. A la derecha del todo podemos ver al protagonista por detrás del miramar de la academia Almi y más a la izquierda el situado en la ferretería Blasco.
En el plano de 1796, se puede ver la puerta abriendo camino entre los
edificios de almacenes, podríamos situarlo donde hoy se encuentra el
monumento a la Paz en la plaza de la Armada Española.
En el plano solicitado por la Diputación para la mejora de Villanueva del Grao de 1856, se puede ver con muchas más construcciones en una encrucijada de calles por las que pasarían los primeros tranvías de Valencia tirados a caballos, más tarde el temido Ravachol a vapor y después los eléctricos que alginos hemos llegado a conocer, lo que provocaría el derribo y una nueva ordenación urbana de los edificios de la zona abriendo nuevas calles como la de la Reina y la del Dr. Lluch.
1856.
Poco a poco iban cayendo todos los miradores que lo acompañaban quedando como testigo de un tiempo que pasa demasiado deprisa.